Olinia es un proyecto viable, considera la Asociación Mexicana de Movilidad Eléctrica

La Asociación Mexicana de Movilidad Eléctrica (EMA) ve viable la empresa estatal de Olinia, el proyecto automotriz impulsado por el gobierno de México, al considerarlo una buena estrategia para avanzar hacia la electromovilidad en el país.

Eugenio Grandio, presidente de la EMA, señaló que Olinia es una propuesta que tiene el potencial de posicionar a México como un referente en este sector, siempre y cuando se consideren todos los aspectos desde la producción hasta la infraestructura de soporte.

“Todo lo que contribuya a la electromovilidad es bienvenido. Olinia es una propuesta que tiene el potencial de posicionar a México como un referente en este sector, siempre y cuando se consideren todos los aspectos desde la producción hasta la infraestructura de soporte”, aseguró Grandio.

El proyecto Olinia busca producir tres modelos de vehículos eléctricos accesibles, con el objetivo de democratizar esta tecnología y reducir la dependencia de los combustibles fósiles. Para Grandio, este esfuerzo no solo es viable, sino necesario en un contexto donde la movilidad sustentable se ha convertido en una prioridad global.

Actualmente, la EMA está en contacto con la Secretaría de Economía y los responsables del proyecto para ofrecer su apoyo y conocimiento en el sector.

Según Grandio, hay tres pilares fundamentales que deben implementarse para garantizar el éxito de Olinia y la adopción masiva de vehículos eléctricos en el país.

En primera instancia, el directivo recomienda establecer un marco regulatorio que ofrezca incentivos fiscales y beneficios tangibles para los usuarios de vehículos eléctricos.

“La regulación actual debe diferenciar entre vehículos eléctricos e híbridos, considerando sus impactos ambientales”, indicó Grandio.

México se posiciona como el segundo exportador de autos eléctricos a EE. UU., con fuertes inversiones en la fabricación de baterías y módulos eléctricos

Asimismo, la inversión en infraestructura de carga es indispensable. Esto incluye puntos de carga rápida en espacios públicos y privados, así como tarifas especiales para la carga nocturna que aprovechen la menor demanda de la red eléctrica.

Por último, es fundamental informar al público sobre los beneficios de los vehículos eléctricos y desmitificar ideas erróneas sobre la seguridad, el reciclaje y la durabilidad de las baterías.

De acuerdo con la EMA, México ya se posiciona como el segundo exportador de autos eléctricos a Estados Unidos, con inversiones significativas en la fabricación de baterías y módulos eléctricos.

Además, empresas automotrices y universidades han comenzado a colaborar para formar talento especializado en la producción y reparación de estos vehículos.

Sin embargo, uno de los principales retos sigue siendo la creación de una cadena de proveedores robusta para fabricar componentes esenciales como baterías, así como garantizar el acceso a infraestructura de carga para los usuarios.

Grandio enfatizó que la adopción de vehículos eléctricos también representa importantes ahorros para los usuarios. En promedio, los costos de operación de un coche eléctrico son entre 60 y 70 por ciento menores que los de un vehículo de combustión interna.

“Esto, sumado a los incentivos y la infraestructura adecuada, puede motivar a más personas a dar el salto hacia esta tecnología”, agregó.