En Cd. Victoria, Tamaulipas, fugas de agua desperdician 200 litros por segundo: COMAPA alerta sobre el problema
El mayor desperdicio ocurre en los hogares, muchas veces sin que los usuarios lo noten

Agencias
Cada día, la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA) de Victoria recibe alrededor de 20 avisos sobre fugas de agua en Ciudad Victoria, y su equipo trabaja para atender incluso más de esa cantidad, informó Fernando García Fuentes.
El gerente general del organismo destacó que la pérdida de agua alcanza los 200 litros por segundo, pero señaló que el problema más grave no está en las calles, sino dentro de los hogares.
“Sin embargo, el mayor problema no son las fugas de agua en las calles o tuberías, sino las fugas que hay en los hogares y que no son reparadas, por ahí se va la mayor parte de agua”.
García Fuentes explicó que muchas personas no se dan cuenta de que tienen fugas de agua en Ciudad Victoria, lo que prolonga el desperdicio hasta que se detecta y repara.
“Actualmente tenemos un inventario de 500 fugas y trabajamos para reducir al máximo el rezago que existe”.
Señaló que la variación en la demanda de agua afecta la presión en las tuberías, y esto, junto con la antigüedad de la infraestructura, provoca nuevas fugas.
Cada día, los reportes ciudadanos rondan los 20 casos, pero el organismo atiende un poco más de esa cantidad dentro de su capacidad operativa. A pesar de esto, la mayor parte del agua perdida proviene de fugas internas en las viviendas.
“La principal fuga se presenta dentro de los hogares de los usuarios, porque se desperdicia mucho líquido, con pequeñas fugas a veces imperceptibles, y es más aparatoso lo que se ve en las calles, pero la fuga grande esa se atiende inmediatamente porque por su naturaleza la población percibe la baja de la presión”.
El gerente de COMAPA subrayó que esta situación no es exclusiva de Victoria, sino un problema común en muchas ciudades del país.
“Son normales estas circunstancias, no se resuelven de la noche a la mañana, no es magia, pero lo que sí podemos hacer es atender lo más rápido posible, cambiar estrategias y empezar a controlar las presiones que lleva un plan de renovación de la infraestructura”.



